Un tanto de Pablo Guerrero en la última jugada del encuentro devuelve la senda de la victoria del conjunto blanquinegro
El Juvenil recibía a la Cultural y Deportiva Leonesa en el Campo de San Roque de la capital pacense con objetivos distintos. Los pacenses en busca de recuperar sensaciones tras unos malos resultados que les hacían perder la ventaja con respecto al descenso. La Cultural por su parte para acercarse a una permanencia matemática, aunque la tiene virtual.
Y no se le pudo poner mejor el encuentro al Juvenil cuando a los ocho minutos, y sin apenas pasar nada en el mismo, fallo a la hora de despejar del portero leones que no consigue acertar con el esférico hace que Georges, mas atento, le caiga el balón con toda la portería vacía y marcar a placer el primero. El tanto pacense hizo que el ritmo decayera. La Cultural controlaba el esférico, pero no conseguía crear la ocasión ante un gran bloque defensivo pacense que volvía a recordar a aquellas jornadas en las que la defensa marcaba el futuro de los partidos.
Con la Cultural controlando, el Juvenil lo intentaba a la contra y de nuevo sería Georges el que tendría la opción de ampliar ventaja, pero su disparo tras un rechace de la defensa se marchaba rozando el palo derecho de la portería leonesa. Tras la ocasión pacense, llegaría el empate. Larga jugada de la Cultu que conseguía romper filas pacenses con un taconazo y su capitán recibía un pase filtrado para acabar metiendo la puntera del pie y batir por bajo a Javi que salió con todo a evitar el mano a mano y mandar al descanso con empate el partido.
Segunda Parte
Tras el paso por vestuarios, el partido fue de detalles. Intenso, pero sin apenas ocasiones. Ninguno conseguía hacerse con el control absoluto del esférico, y tampoco conseguía crear ocasiones que desnivelase el marcador. Lo intentó el Juvenil en una doble ocasión que ni Georges primero y Pablo Guerrero después consiguieron encontrar portería. Todo hacía pensar que el partido acabaría en tablas, pero, ya en el descuento, unas manos a la altura del banderín de esquina a favor blanquinegra desnivelarían la balanza.
Dani Cordero era quien la provocaba y quien la pondría para que la defensa sacase cuando Juanjo se relamía conectar el cabezazo, sin embargo el rechace caería en la frontal del área donde Fer Moreno le pegaría mordida y tras pasar entre varias piernas le llegaba a Pablo Guerrero que embolsaba el esférico y lo levantaba lo justo para, casi de espaldas, poner un pase al fondo de la portería colocándolo en el único sitio donde no podía llegar el portero leonés y poner el delirio entre jugadores, cuerpo técnico y afición blanquinegra que volvía a conseguir la victoria varias jornadas después y tras una semana convulsa en el seno pacense.
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