La Peña Afición Voleibol Arroyo lleva apoyando, siguiendo y animando al Extremadura Arroyo desde la misma temporada que éste ascendió a la Liga FEV, hace once años, con varias características que hacen de este grupo algo especial que trasciende a lo meramente deportivo, su lealtad, su amor por el voley y, sobre todo, su tremenda alegría, que contagia allá por donde va.
Sin protagonismos, sin personalismos, esta agrupación que cada 15 días se cita en el Pabellón de Arroyo de la Luz, y que en muchos casos también se desplaza junto al equipo que milita en Superliga Femenina 2 a otras canchas del panorama voleibolístico español, confiere a cada partido una dimensión diferente que no pasa desapercibida para los otros espectadores.
A tres días de la celebración del transcendental encuentro que deberá afrontar el equipo extremeño que dirige Adolfo Gómez en la localidad vizcaína de Sestao, sus miembros aseguran que éste debe cerrar la temporada regular como se merece, «con un triunfo que certifique la clasificación para poder disputar la fase de ascenso a Superliga».
En este sentido, aseguran que
«otra cosa será luego ascender y jugar en una liga tan profesional como Superliga, en la que es evidente que no podremos estar tan cómodos como en Superliga 2, primero porque será mucho más difícil lograr victorias y segundo porque también será más complicado que las jugadoras de Arroyo puedan disponer de minutos en el septeto titular».
En cualquier caso, señalan,
«eso es algo que concierne a la directiva del club, que siempre ha apostado por un modelo de club, que nos entusiasma, basado en el trabajo de cantera».
«Somos fieles a un sentimiento, a un equipo y a un deporte que nos encanta, y no solo apoyamos al equipo de máxima categoría, sino que en muchas ocasiones también animamos a los equipos de base, porque creemos que es muy importante que nuestras jugadoras más jóvenes también se sientan arropadas», asevera este grupo de peñistas.
El próximo sábado no podrán acompañar, como peña, al equipo en Sestao, ya que la expedición cacereña partirá, de forma excepcional, un día antes, el viernes, para afrontar el partido en las mejores condiciones posibles, pero manifiestan que seguirán el encuentro por alguna red social, «y aunque están a cientos de kilómetros, tenemos la seguridad de que las jugadoras sentirán nuestro apoyo, nuestro aliento y nuestro grito, ¡Arroyo!».
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